top of page
Buscar

Autoexigencia

La auto-exigencia surge de la sensación de insuficiencia frente a la idea de alcanzar la perfección. Esto lleva a controlar el entorno compulsivamente para lograr eso que creemos perfecto.

Pero querer controlar todo, sólo trae frustración.

Recuerda que el control es una ilusión que condiciona. Genera rigidez y resistencia al cambio.

Permítete ser imperfecto, entiende que equivocarte es una parte necesaria de la vida.

Y no olvides que maltratarte por no lograrlo, sólo te hará sentir limitadx.


¿Eres demasiado exigente contigo mismo?


Señales para descubrirlo:

  • Necesito ser la/el mejor en todo lo que hago

  • No puedo cometer errores

  • Me critico mucho

  • Me siento culpable cuando cometo algún error

  • Prefiero hacer las cosas yo misma/o, no confío en cómo puedan hacerlo los demás. Me cuesta delegar

  • Necesito tenerlo todo controlado

  • No puedo decir que no


La autoexigencia es la característica que presenta una persona cuando se exige demasiado a sí misma.

A nivel emocional la auto-exigencia puede generar depresión, ansiedad y agotamiento psicológico.

A nivel social se hace difícil decir que no porque nos ubicamos frente a la necesidad de ser valoradx y validadx, temiendo decepcionar a los demás.


Si te conectas con tu desarrollo o superación personal, buscando lograr objetivos –alcanzables- y reconociendo tus límites, la autoexigencia se convierte en una cualidad positiva que te traerá bienestar.


¿Cómo bajar la autoexigencia?


Lo más importante a tener en cuenta es que lograr ser menos autoexigente depende de ti, necesitarás estar dispuesto a hacer algunos cambios tanto en tu rutina como en tu mente.

Para poder ser menos exigente contigo mismx intenta:


Plantear metas alcanzables: Intenta reflexionar sobre cuáles son las metas a las que quieres llegar evaluando si crees que vas a poder alcanzarlas de verdad. La honestidad contigo mismx es el secreto.


Reconoce tus logros: Es importante que te des un respiro, que disfrutes lo que has logrado y que, aunque te marques nuevas metas, te des el espacio para alegrarte por lo que conseguiste.


No te culpes: Si no has conseguido llegar a cumplir esa meta, no te fastidies. Nadie es perfecto ni tú tampoco, por tanto, aprende de los errores y analiza si realmente, ese objetivo era posible de conseguir. En el caso de que creas que sí lo era, simplemente deberás analizar en qué has podido fallar e intentarlo de nuevo.

Recuerda: de los errores se aprende.


Aprende a decir que "NO": Ser conscientes de nuestros límites y de hasta dónde podemos llegar es vital para poder tener una vida feliz y relajada. Por eso, de vez en cuando, es necesario decir que NO

No eres un súper-héroe, por tanto, no actúes como tal.




9 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page